viernes, 11 de abril de 2008

Continúan las Internas en el FreChaFlo


Palabras del Subcomandante FG:

Carta abierta a la alta comandancia del FreChaFlo:

No vamos a contestar calumnias, ni a negociar con una pistola en la cabeza.

Baste de prueba mi palabra y si ella no basta para mis compañeros revolucionarios, entonces el camino de la revolución chatista no es suficientemente ancho para todos. La convicción y la alegría pesquera de este soldado debería ser suficiente prueba, todo lo demás es ilustración alegórica.

Estoy siendo perseguido con este tema desde el mismo momento en que envié el mensaje cifrado notificando tamaña hazaña al alto comando. Me pregunto, no será este -cual émulo del piquete de la abundancia- el piquete de los grandes pescadores (que hace rato no pescan) frente a lo que consideran inaceptable: las alegrías consecutivas -bagre y boga- del pescador sin caña, sin prosapia y sin tradición pesquera.

Señores, renuncio a todos los cargos pero no a la convicción de los principios chatistas según el cual cada hombre y cada mujer en el FreChaFlo es un pescador cuyos relatos de pesca deben ser creídos y valorados. Haciendo frente al piquete de la abstinencia pesqueril de los grandes señores de la caña que hoy ocupan el alto mando del FreChaFlo, me pongo inmediatamente a la cabeza de la insurgente columna anarquista de la Calle Castelli bajo el lema: todos los chatistas somos pescadores, contra la aristocracia de los dueños de las cañas en el movimiento.

FG
Soldado-pescador sin caña
Columna Anarquista de la Calle Castelli
Frente Revolucionario Chato Flores
La revolución es un sueño eterno


* * *

Respuestas del Subcomandante HC:
Queridos compatriotas revolucionarios:

Estas, mis palabras, son pájaros en vuelo, ideas al azar, que no por carecer de carácter discursivo olvidarán sus razones lógicas:

Creo que nadie puede alzar ninguna bandera habiendo sacado dos (2) pescados en dos excursiones, siendo que el Comandante y quien suscribe llevan años de ventaja en cantidades y calidades de piezas obtenidas, embarrándose las botas en el lodo de las orillas, trepándose a las barrancas, sumergiéndose al agua para estar más cerca del objetivo.
El dedo, la palabra acusadora del Subcomandante se alza por estos dos hechos aislados, mientras que el resto de las veces que el fogón nos reclamó, a gatas se cebaba unos mates o atendía un Pochi. La pesca es un acción, una actividad, una ocupación de todos los días, y no un fin de semana santo y salvaje.

Además: pregunto: ¿Cual es el verdadero Subcomandante? ¿El que pide apoyo en el momento en que es necesario consolidar la idea de grupo, o el que plantea situaciones de conflicto, quiebres internos, posturas irreconciliables? ¿Cómo puede sentirse perseguido, después que la caña con la pescó aquel bagre maguayense, fue prestada mismamente por el que suscribe? ¿Quien es este señor? ¿El D’Elia de la pesca? ¿A qué jactarse de no tener caña y despotricar contra los que, día a día, luchan por mantener enteros sus equipos de cosecha ictícola?

El anzuelo no se mancha.

* * *
Respuestas del Comandante General:

Aló FreChaFlo:

Creo que las pruebas solicitadas no van a ser entregadas. El virus de la mentira del pescador ha roto los lazos fraternales que hacían del movimiento el orgullo nacional de la Península. Nosotros estamos con aquellos que no tienen cañas, con los que pescan ranas en las canaletas, con aquellos que en cada palada no encuentran las lombrices necesaria para el encarne, los que salan las tripas de pollo, los que juntan maíz de la calle para poner en el anzuelo, los que encarnan con cáscara de mandarina.

Ese es nuestro pueblo, nos vienen a decir que somos gente de anzuelo sucio. Y desde aquí les digo: nuestros anzuelos están limpios de mentiras. Siempre que volvemos a nuestras casas y nuestros seres queridos nos esperan con la ilusión de ver que pescamos, debemos decir “nada, no hay un carajo en este río, ni un pique”. Y ahora vienen a decirnos de una boga de dos kilos... Por favor... No es algo fácil de digerir...

No vamos a ser eco de aquellos que nos difaman de ser los dueños de las cañas, aquellos que se dicen llamar soldados sin caña... Les decimos que los perdonamos, que las cañas son de todos y para todos. ¡Vengan, frechaflenses! Habrá pocas lombrices, poca agua en el río, pero la ilusión de sacar El Gran Pez sigue en pie y no se entrega fácilmente. Daremos pelea, caña a caña, lombriz con lombriz, bagre por bagre, boga por boga. Los convoco a todos, pero sin mentiras...

¡A tirar las líneas, camaradas.!

¡Larga Vida al FreChaFlo!

(La imagen extraoficial que abre este pos, a la que tuvimos acceso en exclusiva, es la de la presunta "boga" obtenida en territorio santafesino por el Sucomandante FG)

3 comentarios:

Unknown dijo...

¡ABAJO LA OLIGARQUÍA CAÑATENIENTE!

epg dijo...

Se me quebró la caña...

Fede dijo...

He aquí la imagen que debió ilustrar este breve epistolario:
http://fedego.blogspot.com/2008/04/un-bagre.html

Esta es la prueba que certifica la pesca. Lo demás, habladurías.